domingo, 14 de agosto de 2011
Emboscada
Emboscada
Las plantas de los pies ya se te agostan:
tantos pasos descalzo y sin embargo
no has logrado alejarte a ningún sitio
y no da más de sí el cuentakilómetros.
No vas a seguir más porque comprendes
que se ha vuelto diana tu refugio,
que hay fieras que te cercan las salidas,
que cargas con el lastre de ti mismo,
que Dios trazó el camino haciendo eses
hasta caer de bruces en el punto
minado y atrayente en que te encuentras.
Tu faz, tu fe, tus falsas convicciones
se desmoronan, sientes el asfalto
volviéndose a tus pies vitrocerámica:
trabajan a destajo en el infierno.
Publicado por
Raúl Sánchez
en
17:03
Enviar por correo electrónicoEscribe un blogCompartir en XCompartir con FacebookCompartir en Pinterest
Etiquetas:
Dos hombres y un destino,
Poemas,
Soneto blanco
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario